martes, 19 de febrero de 2013

Sobre la concentración

( Me encontré esto por ahí, y me pareció interesante)
 
William James dijo que "todo mundo sabe lo que es la concentración. Es tomar control de la propia mente, en forma clara y vívida, para conducirla por uno de los varios caminos que simultánea y constantemente se le presentan. La esencia de la concentración es su capacidad de atender de manera enfocada. Implica siempre la renuncia a algunas cosas para atender efectivamente a otras."

La concentración es la base del pensamiento eficaz. Y además literalmente salva vidas. El 80% de los accidentes de automóviles en Estados Unidos son provocados por la falta de atención.

La concentración es también el pilar del amor. La forma primordial que toma el amor es la atención concentrada en otra persona. Cuando amamos a alguien, lo primero que hacemos es prestarle atención. Según P. M. Forni, profesor de la Johns Hopkins University, "la membresía al género humano trae consigo la expectativa de que vamos a otorgar un alto grado de atención benevolente a otros seres humanos. Aquello a lo que le prestamos atención, da frutos; aquello que desatendemos, se marchita". El que ama presta atención -- es decir, se concentra en el otro.

Si la atención y la concentración son tan importantes, ¿por qué nos distraemos con tanta facilidad? Nuestro cerebro evolucionó para distraerse, porque durante millones de años nuestros antepasados salvaron sus vidas gracias a su capacidad de prestar atención al menor signo de cambio en el entorno, donde podía acechar un predador. Pero hoy no tenemos por qué estar alertas a la menor señal de cambio en nuestro entorno, porque nuestra vida no se juega en ello. Al contrario: nuestra prosperidad se juega en la capacidad que desarrollemos para domar nuestra mente y concentrarnos.